
(Universal) El vertido de crudo del sur de California, resultado de la fuga de unos 3 mil barriles de petróleo o unos 570 mil litros de una plataforma marina frente a la costa de Huntington Beach, cerca de Los Ángeles, es uno de los peores desastres a los que se ha enfrentado la zona «en décadas», valoró este domingo la alcaldesa de la localidad, Kim Carr.
«Este vertido de crudo supone una de las situaciones más devastadoras a las que se ha enfrentado nuestra comunidad en décadas», dijo en una rueda de prensa Carr.
La alcaldesa admitió que los 3 mil barriles de los que se habla oficialmente probablemente se queden cortos, puesto que esa es la cifra que ofreció la empresa responsable del vertido ayer, y se cree que no ha conseguido frenarse por completo.