Alemania (Economista).- La justicia alemana decretó este jueves libertad condicional para el expresidente catalán Carles Puigdemont, tras estimar que su eventual extradición a España no puede hacerse bajo la acusación de rebelión, sino solamente de malversación de fondos.
El tribunal del estado de Schleswig-Holstein, donde está encarcelado el líder independentista, estimó que el delito de «rebelión» que presentó la justicia española en la orden de arresto no es equiparable en derecho alemán.