Por: Alejandro Muñoz
Puerto Vallarta, Jal.- Una vez que fue habilitada la página para registrar a los adultos mayores para recibir la vacuna anticovid, los vallartenses analizan si inscribir o no a sus familiares, toda vez que existen muchas dudas e incluso, temor en torno al biológico.
Sin embargo, la preocupación de los hijos por proteger a sus padres y adultos mayores los impulsa a buscar esta alternativa.
“Sí queremos que le pongan la vacuna, queremos protegerla de esta enfermedad, pero ya ves que la página se cayó”, señala Jessenia López, quien trata de inscribir a su madre en la página que el gobierno federal creo para ello.
Personas de avanzada edad, como la Leonor Gómez, de 103 años, que no han recibido vacuna alguna y sus familiares temen que al aplicarle el biológico experimenten una reacción adversa.
“Tenemos la iniciativa de que le pongan la vacuna, ya nos hablaron del programa Bienestar y la inscribimos, pero estamos con el temor de que sea contraproducentes, mi abuelita nunca ha recibido una vacuna”, detalla Beatriz Miramontes, su nieta de la señora Leonor.
Asimismo, y aunque los familiares busquen proteger a sus adultos mayores, son estos los que tienen la última palabra, señala Patricia Reyes, quien a pesar de que busca inscribir a sus padres en el programa, estos no han decidido si sí quieren o no aplicarse la vacuna.
De la misma manera, existen personas que desconfían aún de la vacuna, debido a la serie de desinformación que se ha generado, incluso alguna con tendencias de conspiración y otro tipo de argumentos que han sido publicados, sobre todo, en las redes sociales, generando con ello la paranoia y la fobia a este tipo de biólogicos.
“Nosotros como hermanos sí queremos, pero mi papá no quiere, es que él tiene ideas en contra de la vacuna, que si son verdaderas, que si son para dañarnos o incluso que si son parte de una conspiración”, explicó Jesús Venegas.
Es de señalar que como parte de la estrategia nacional de vacunación, el gobierno federal determinó que serán los adultos mayores los que sean vacunados después del personal médico y así continuar con el combate a este enfermedad que ha afectado a casi dos millones de personas en México y arrebatado la vida a casi 160 mil.
