Por Efrén Urrutia
Puerto Vallarta, Jal.- Mientras en el año 2016 ese destino turístico, el segundo de playa más importante de México, obtuvo históricas cifras de derrama económica por el orden de los 15 mil millones de pesos, según el Fideicomiso de Turismo, otra cruda realidad que aqueja a los habitantes de esa ciudad son los raquíticos sueldos estandarizados por el salario mínimo de 80.04 pesos.
Ante este panorama turístico-social, Paralelo Informativo cuestionó al presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en México, Gustavo de Hoyos Walther y al presidente de dicho organismo en Puerto Vallarta, Gabriel Igartúa Sánchez.
Al respecto, de Hoyos externó: “en los últimos 20 años hemos perdido competitividad salarial. Estamos solamente por encima de Nicaragua y por debajo de todos los países de América Latina, pero lo más preocupante: estamos perdiendo productividad como país”.
SALARIO DE 89 PESOS, EL “IDEAL”
¿Cuál sería el salario ideal entonces?, se cuestionó: “para nosotros, tendríamos que llegar 89 pesos de manera general. No es el ideal, pero es el que ayudaría a que no haya algún mexicano que trabajó 8 horas al día, y que llegue a su casa con hambre”, consideró el líder nacional de Coparmex.
Mientras tanto, a Igartúa Sánchez se le preguntó: ¿qué piensa de qué la gran derrama que se genera no se queda en Puerto Vallarta? “Hemos analizado lo que significa la presencia de grandes conglomerados transnacionales que aquí tienen presencia. Pero también hay que ver la parte positiva: las inversiones que se han hecho y la generación de empleos”.
Sin embargo, reconoció que lo anterior se ha convertido en un problema ya que gran parte de la derrama económica turística no se queda en Puerto Vallarta, debido a que la mayoría de las empresas instaladas en el puerto son de origen extranjero.
“Debemos buscar las medidas con el gobierno, para que de una forma u otra se quede una mayor participación (derrama económica) en nuestro país (…). Así podremos equilibrar un poco el aspecto de la derrama del peso turístico que se tiene en México”, informó.
El único recurso reconocido como producto de la actividad turística que se queda en la ciudad es el Impuesto del 3% al Hospedaje, que en 2016 alcanzó alrededor de 100 millones de pesos, y que es utilizado para la promoción, publicidad y relaciones públicas del destino bajo la administración del Fideicomiso de Turismo.
Añadir que Puerto Vallarta, en 2015, fue considerada por la Revista Forbes como una de las ciudades más caras de México para vivir, ya que se ubica como la ciudad más costosa para comprar una casa, con un precio por metro cuadrado de edificación de 22 mil 314 pesos.
