(MundoDeporte) Nos maravillamos con las posibilidades que nos otorgan las misiones de la NASA, pero la realidad es que son muchos más países, además de Estados Unidos, los que siguen buscando la manera de que la humanidad continúe conociendo lo que nos depara el espacio exterior. Hoy tenemos que dar la enhorabuena a Japón y su programa espacial.
La quinta potencia mundial en alcanzar la Luna es Japón
Tal y como puedes leer en la publicación que te dejamos bajo estas líneas, y en el propio comunicado de la JAXA, ha sido la propia Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial le que ha confirmado que el módulo SLIM, acrónimo de Módulo de Aterrizaje Inteligente para Investigar la Luna, ha alunizado con éxito en nuestro satélite.
Según los datos revelados por la JAXA, ha sido a las 16:20 horas, horario peninsular español, del pasado 20 de enero cuando el módulo lunar pisó la superficie de la Luna. Tras el aterrizaje, y para alivio de los participantes en la misión, parece que las comunicaciones pudieron restablecerse con SLIM.
En el momento de emisión del comunicado, la JAXA aseguraba que los paneles solares del módulo no estaban generando energía y que la principal prioridad era la recuperación de los datos del módulo SLIM. Tras un análisis de dichos datos, la propia agencia continuará desvelando detalles de la misión en próximas actualizaciones, tanto en su página web como en redes sociales.
Cabe recordar que en la actualidad son varios los países que se han aventurado, o lo harán próximamente, en la exploración de la Luna. Estados Unidos ha visto cómo fracasaba su intento de alcanzar el Polo Sur, aunque ya tiene en marcha la segunda parte de la misión Artemis, y otras naciones como la India demuestran el poder oriental en materia científica.
Después de Estados Unidos, la extinta Unión Soviética, China e India, Japón se une al exclusivo club de países que han llevado el nombre de una nación hasta nuestro satélite, siendo el tercer país en hacerlo en este siglo, dado que Estados Unidos alcanzó la Luna en la década de los años 60 y la Unión Soviética en los años 70.
La misión SLIM, por cierto, integra una novedosa tecnología para realizar aterrizajes de alta precisión, que podría suponer un antes y un después en la llegada de nuevos instrumentos y módulos a la Luna y otros cuerpos celestes.
