Por Efrén Urrutia
Puerto Vallarta, Jal.- Tras el desgaje de un cerro en la colonia Amapas, frente a Playa Los Muertos, suceso que acabó con la calle Santa Bárbara y con una obra inmobiliaria que estaba clausurada, y ante el silencio de las autoridades municipales, el experto en urbanismo Alfonso Baños Francia consideró que ese hecho es una fuerte y grave llamada de atención a la comunidad, a empresarios del ramo y a las autoridades.
“Es muy grave. Es una jalada de orejas importante y yo creo que la naturaleza nos vuelve a recordar que tenemos que ser empáticos con ella, y que no podemos imponer cosas que van en contra de la propia lógica del territorio.
Entonces, yo me pregunto qué tiene que pasar para que por fin escuchemos la llamada… yo lo que he visto en los últimos años en la imposición de una mentalidad extractiva donde se pretende maximizar las ganancias en la franja turística, principalmente”, cuestionó.
El arquitecto de profesión, doctor en Urbanismo y catedrático del Centro Universitario de la Costa (CUC), ha venido investigando y documentando los procesos de expansión urbana de Puerto Vallarta en los últimos 50 años, y ha encontrado que en la última década han incrementado las construcciones voraces en toda la franja turística de la ciudad, muchas de ellas en zonas montañosas.
“Sí hay consecuencias pero que desafortunadamente se comentaron desde hace muchos años pero parece ser que los responsables de autorizar, de ejecutar estas obras hicieron caso omiso… La vida siempre es sabia y la realidad tarde que temprano se impone, entonces yo a lo que invitaría es a ser mucho más humildes y mucho más respetuosos. Creo que sí es una llamada importante”, enfatizó.
Consideró que el derrumbe del cerro, mismo que no causó lesiones ni muertes humanas, “son francamente imágenes de un estado de guerra, es como si hubieran bombardeado ese predio, es muy lamentable”.
¿RIESGO EN LA ZONA?
Sin ser experto estructurista, Baños Francia informó que el problema específico de ese terreno de la colonia Amapas fue que estuvo escavado durante mucho tiempo, fue más de un año de excavación, y aunque se creó una protección con concreto lanzado alrededor, en realidad había un interperismo importante, dijo.
“Es decir, el suelo estaba expuesto a las acciones de la lluvia, del viento, del mar. Entonces por razones de una clausura, quedó prácticamente vacío y esas son las consecuencias inmediatas, pero no necesariamente significa que otros predios alrededor vayan a sufrir el mismo proceso, creo que este es un caso muy puntual.
Pero insisto, la llamada es a poner las barbas a remojar. O sea, y que tiene que ver con Vallarta siempre ha recibido inversión inmobiliaria en toda su historia, pero en los últimos 10 años yo ubico una aceleración de la extracción en estos territorios para que pocos ganadores se lleven estas ganancias, y ya hay afectaciones a las vialidades y a viviendas alrededor”, terminó.
