Por Doraliz Terrón Moreno
Puerto Vallarta, Jal.- Lo que comenzó como un rumor de atentado en el Aeropuerto Internacional de Puerto Vallarta, fue convirtiéndose en una intensa movilización de autoridades de los tres niveles de gobierno por el derrame provocado de turbosina.
De acuerdo al reporte emitido por el Administrador del recinto, Saúl Ernesto Sanabria, aproximadamente a las 10:00 horas de este jueves 5 de enero, una camioneta ajena al Aeropuerto ingresó por la zona de combustibles a un área de seguridad restringida del Aeropuerto y tuvo una colisión con un vehículo de combustible, ocasionando un derrame de turbosina.
Se presumió que el conductor actuó bajo los influjos de alguna droga, ingresando a esta área restringida tras derribar las rejas de seguridad con una camioneta Ranger color azul marino, para continuar circulando en la zona hasta impactarse de frente contra una pipa que trasportaba 20 mil litros de turbosina, misma que en ese preciso momento abastecía a una aeronave magnicharter.
Por ello y ante la fuga de turbosina, se activaron las medidas de emergencia para realizar las acciones de limpieza, detener su difusión y evitar cualquier riesgo que pudiera representar la combustión del mismo.
Entretanto, se detuvieron las operaciones y 6 vuelos fueron retrasados en su programación de aterrizaje, de los cuales 2 pertenecían a la empresa Aeroméxico, uno de Volaris, una ruta de Interjet, un magnicharter y una llegada internacional por parte de American Airlines.
Fueron en total 2 horas de incertidumbre y afectación para turistas al interior del aeropuerto, para que pasadas las 12 del mediodía se restablecieran actividades en las ya aglomeradas salas de espera y filas de las diferentes aerolíneas involucradas.
Se informó también que las investigaciones se desarrollarán de inmediato y el sujeto involucrado fue detenido, para que la autoridad pertinente determine la condición del conductor, los motivos que lo impulsaron y la penalidad a la que se hará acreedor.
