(NewsWeek) El peso mexicano, una de las monedas más intercambiadas del mundo, se fortaleció hasta ganarse el mote de “superpeso”, pero la victoria arrolladora en las elecciones generales de Claudia Sheinbaum y la izquierda, con sus promesas de reformas, empujaron la divisa hacia la volatilidad (en altibajos).
En los dos años previos a la elección del 2 de junio, el peso se apreció casi 14 por ciento contra el dólar, según el Banco de México (Banxico), algo de lo que el presidente Andrés Manuel López Obrador presume como un logro.
Sin embargo, tras los comicios la moneda cayó hasta 10 por ciento ante temores de que la futura presidenta haya obtenido un cheque en blanco para sus anunciadas reformas constitucionales gracias a las mayorías que tendrá en el Congreso.
“Es un mandato amplio para Sheinbaum y pone un poco nervioso al mercado, sobre todo por las reformas prometidas”, explica Luis Gonzali, vicepresidente y codirector de inversiones en la firma Franklin Templeton.
Las transacciones diarias con pesos mexicanos promedian unos 114,000 millones de dólares, según el Banco de Pagos Internacionales (BIS), propiedad de 63 bancos centrales. Es una cifra superior a otras monedas emergentes como el real brasileño.
Aquí los puntos clave que explican los altibajos del peso mexicano, duodécima economía mundial y principal socio comercial de Estados Unidos.
ALTIBAJOS DEL PESO MEXICANO ANTE LA COMPOSICIÓN DEL CONGRESO
El peso mexicano se apreció durante meses por el diferencial de tasas entre Estados Unidos y México, que ofrece mayores rendimientos a los inversionistas que se posicionan en la moneda mexicana.
Las remesas que envían los migrantes mexicanos, principalmente desde Estados Unidos y que sumaron 63,313 millones de dólares en 2023, un 7.6 por ciento más frente a 2022, suponen una fuerte demanda de pesos por parte de quienes las reciben.
Además de esa mayor oferta de dólares, el peso se venía beneficiando de la perspectiva de inversiones en aumento por el “nearshoring” o relocalización de empresas, especialmente de Asia, a la frontera con Estados Unidos.
Si bien los mercados tenían asumido un triunfo de Sheinbaum sobre la centroderechista Xóchitl Gálvez, la composición del Congreso fue sorpresiva, lo que provocó además una caída bursátil.
El partido Morena y sus aliados se encaminan a tener una supermayoría en el Congreso bicameral que se instalará el 1 de septiembre, por lo que el oficialismo podrá modificar la Constitución sin negociar con otras fuerzas.
Sheinbaum, quien asumirá el 1 de octubre, promete sacar adelante una serie de reformas planteadas por López Obrador, incluida una profunda cirugía al Poder Judicial, al que ambos acusan de estar corrompido y al servicio de intereses privados.
SOBRERREACCIÓN DE INVERSIONISTAS
Para Erick Martínez, estratega de mercado cambiario del banco británico Barclays, hubo una “sobrerreacción” inicial de los inversionistas tras la jornada electoral.
“Fue similar al de otros episodios de elevada volatilidad (como la pandemia o la elección de Donald Trump en 2016), pese a que no se cuenta con los detalles sobre la implementación de las reformas ni hay implicaciones en términos de un deterioro de las finanzas públicas”, señala.
En medio del nerviosismo de los mercados, Sheinbaum se apresuró a ratificar al secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, en su cargo. En cuanto a la reforma Judicial, la propuesta busca que los magistrados de la Suprema Corte y cientos de jueces sean elegidos por voto popular a partir de 2025, lo que según la oposición amenaza con politizar la justicia.
Actualmente, los miembros del máximo tribunal son propuestos por el presidente y sometidos a aprobación del Senado. Otros son nombrados por el Consejo de la Judicatura Federal, a cargo de la administración del Poder Judicial.
“PODRÍA CERRAR EN 19.20 PESOS POR DÓLAR A FINALES DE AÑO”
Sheinbaum anunció debates sobre la reforma, que incluirían a especialistas. “El tema es que están cambiando las reglas del juego y eso no le gusta a ningún inversionista ni a ninguna empresa”, señala Luis Gonzali.
“Lo que más preocupa es que pudiera implicar un menor balance entre poderes, con mayor concentración en el Ejecutivo”, advierte por su parte Erick Martínez.
El banco español BBVA estima que en los próximos meses el peso seguirá mostrando “cierta volatilidad, al estar sujeto a una mayor incertidumbre a la normal”. Además de la reforma judicial, esa inestabilidad está relacionada con la elección presidencial en Estados Unidos, donde el demócrata Joe Biden se juega la presidencia frente al republicano Trump el 5 de noviembre. El BBVA pronostica un tipo de cambio al alza, en torno a los 19 pesos por dólar a fines de este año, mientras Barclays prevé 19.20 pesos.