Por: Alejandro Muñoz
Puerto Vallarta, Jal.- Tras el sismo de magnitud 7.7 registrado la tarde del lunes con epicentro de Cualcomán, Michoacán, no se descarta que un movimiento telúrico de esa misma magnitud se presente en los próximos dos o tres meses.
Lo anterior los señaló La doctora Araceli Zamora Camacho, profesora investigadora adscrita al Departamento de Ciencias Exactas del Centro Universitario de la Costa de la Universidad de Guadalajara.
Y es que el Pacífico Central Mexicano se encuentra en una zona tectónica de gran actividad, de allí que se presenten al menos unos 10 sismos al día, tan solo en el área de Puerto Vallarta, la gran mayoría de ellos imperceptibles, sin embargo, las placas que confluyen aquí, acumulan una gran cantidad de energía que generan sismos como el ocurrido el lunes 19 de septiembre.
La doctora Zamora Camacho, explicó que frente a las costas de Jalisco existen al menos cuatro placas, mismas que están en constante movimiento.
“Las placas que están frente a Vallarta, pues son la placa de Rivera, la placa De Cocos y placa de Norteamérica. La placa del Norteamérica es una macroplaca, es una placa muy grande; la de Rivera es una microplaca y la de Cocos, digamos que es mediana, entonces, son piezas de rompecabezas que quieren embonar y moverse en la misma dirección, pero dependiendo de las densidades que tienen, se mueve en diferentes formas, por eso la fricción entre ellas.
Es como si nosotros en un librero quisiéramos acomodar libros delgaditos y libros gordos ¿qué es lo que va a pasar con el delgadito? se va a reformar, lo mismo pasa con la micro placa y además tenemos el bloque de Jalisco, entonces ese bloque está ahí metido queriéndose mover a todos lados, pero a todo mundo lo empuja.
Entonces ahí es donde se empieza a generar la sismicidad que tenemos”, explicó.
La doctora en Ciencias de la Tierra-Sismología y Vulcanología, egresada de la UNAM, destacó que debido a estos movimientos y la densidad de las placas es científicamente imposible predecir un sismo, sin embargo, dijo que existe una gran posibilidad de que se registre un nuevo temblor de igual magnitud que el de este lunes.
“Y por eso es que no sabemos ni cuántos ni de qué tamaño van a ser, porque puede ser que la aspereza que siga sea igual de grande y que se genere otro evento”, añadió la doctora Zamora Camacho, quien agregó que en el estado de Guerrero se han producido “dobletes”, eventos que son generados de magnitud 7.7 en periodos de 2 a 3 meses, “entonces no es de extrañarse que también aquí pueda presentarse un evento de estas características: un evento grande, después muchas réplicas, y después otro evento grande, son conocidos como ‘dobletes sísmicos'».
De tal manera que la doctora Zamora Camacho reiteró que no existe manera alguna de predecir los sismos, pues se está hablando de acumulación de energía dinámica, cuyo tiempo de reacción no ha sido posible calcular.
“Predecir es muy complicado, muy complicado ¿por qué? porque es el equivalente a decir cuándo me voy a enfermar. Yo me puedo cuidar, puedo tener todos los cuidados, pero mi sistema tiene un deterioro. ¿Cuándo se va a deteriorar? es el equivalente a decir cuándo va a temblar.
Entonces, no sabemos, lo que sí sabemos es que hay una acumulación de energía, porque vivimos en un planeta vivo, ese movimiento se está generando constantemente, pero no sabemos exactamente el punto de liberación, que es ahí donde nosotros diríamos que tal día, a tales horas va a ocurrir esta liberación de energía. Aún no tenemos esa capacidad de poderlo hacer”, expresó.
De acuerdo al Servicio Sismológico Nacional, hasta las 15 horas del 20 de septiembre 2022 se habían registrado 849 réplicas del sismo de magnitud 7.7 ocurrido en Michoacán el lunes 19 de septiembre, siendo el más grande de 5.8.
